¿Quiere hacerse rico? Aprenda a ahorrar
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«Si quieres ser rico, piensa en ahorrar además de ganar».
Benjamin Franklin
El ahorro es la práctica de utilizar los recursos de forma inteligente. Saber gestionar su dinero puede hacerle más feliz.
La idea principal del ahorro consiste en utilizar todo lo que se tiene de la manera más sabia posible para la propia prosperidad.
El antiguo filósofo griego Arístipo observó de cerca la sociedad y formuló los principios de una vida feliz. Como hoy, en aquella época remota, el despilfarro llevaba a menudo a la gente a la ruina, y esto no podía escapar a la atención del pensador.
La directriz XXI del Código de Arístipo reza:
«Sé ahorrativo y cauteloso en los gastos».
¿Por qué es importante?
El uso racional del dinero disponible ayuda a mejorar la vida en gran medida. La capacidad de ahorrar es el factor principal para aumentar el capital personal. Las necesidades de una persona crecen junto con sus ingresos. Pero por mucho que trabaje, sus ahorros no crecerán si no sabe ahorrar.
Hay que ser ahorrativo y evitar los gastos innecesarios. Incluso con un ingreso pequeño, una persona puede ahorrar y hacerlo de forma eficaz. Es importante canalizar el flujo de dinero en la dirección correcta para crear una base sólida para las acciones posteriores. Las finanzas bien distribuidas le ayudarán a realizar planes bien pensados en el futuro.
Los multimillonarios dan ejemplo
Cuando se tiene mucho dinero, la tentación de gastarlo en todo es grande. Pero los empresarios más exitosos e influyentes saben que es necesario contenerse. Su ejemplo nos demuestra que hay que ahorrar, aunque se esté en lo alto de la lista Forbes.
Amancio Ortega, el empresario e inversor español, fundador de Inditex, que posee miles de tiendas de marcas famosas en 88 países del mundo.
Fortuna: 53 700 millones de dólares
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La fabulosa riqueza no ha convertido a Ortega en un defensor del gasto irracional y elevado. El multimillonario vive en un piso en la ciudad turística de La Coruña, en el norte de España. También prefiere la sencillez en su vestimenta y lleva trajes de marcas económicas.
Warren Buffett, el empresario estadounidense, el inversor más famoso del mundo.
Fortuna: 95 600 millones de dólares
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Buffett vive en una casa relativamente pequeña en Omaha, Nebraska, que compró por 31 000 dólares en 1958. Modesta para los estándares estadounidenses, la mansión satisface al empresario que cuenta con un capital fabuloso. Warren podría comprar cualquier casa, pero no piensa hacerlo solo porque el estatus de rico le obligue a vivir como un rey.
Carlos Slim Helú, el empresario mexicano, considerado el hombre más rico del mundo entre 2010 y 2013.
Fortuna: 74 700 millones de dólares
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El dueño de la mayor fortuna de México no está acostumbrado a rodearse de lujos. En las reuniones de negocios lleva un sencillo reloj electrónico con calculadora incorporada. El multimillonario conduce su propio coche y viaja sin chófer personal, e intenta no utilizar los servicios de guardaespaldas. «Evita los excesos incluso en los momentos más fáciles de tu vida, pues te dará estabilidad en los momentos más difíciles», dice Carlos.
Michael Bloomberg, el magnate estadounidense de los medios de comunicación y ex alcalde de la ciudad de Nueva York.
Fortuna: 76 800 millones de dólares
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En 2010, Bloomberg admitió a los periodistas que solo tenía dos pares de zapatos y que los llevaba desde hacía 10 años. Esta actitud frugal es típica de él en todo lo que hace. Por ejemplo, cuando compra café, siempre pide la taza más pequeña.
Como vemos, las personas que han alcanzado el «Olimpo financiero» son muy conscientes de la importancia del ahorro. La prudencia en el gasto es un requisito previo para la estabilidad y la prosperidad. No deje que el dinero se le escape de las manos, ¡ahorre y multiplique!
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