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¿Por qué la cortesía siempre está de moda?

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    « Sé cortés y respeta la dignidad de otras personas ». Arístipo de Cirene, filósofo, discípulo de Sócrates La cortesía no es solo una manifestación de buenos modales y respeto por los demás, sino también un elemento clave de las relaciones exitosas en la sociedad. Crea una atmósfera agradable y amigable que propicia la comunicación eficaz . Cuando somos corteses, expresamos preocupación por los sentimientos de los demás, generamos confianza y nos ganamos una reputación positiva. Analicemos lo importante que es esta cualidad en la sociedad actual.   El papel de la cortesía en la formación de relaciones estables: ayuda a respetar los límites personales ¿Con qué frecuencia nos sentimos incómodos cuando alguien invade nuestro espacio personal? Esto puede suceder no solo físicamente, sino también emocionalmente cuando alguien no respeta nuestras convicciones o hace preguntas sin tacto. La cortesía sirve como una barrera que protege a una persona de la invasión no deseada del espacio per

Un segundo lo resuelve todo: la regla de la comunicación eficaz

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«Sé capaz de cooperar con los demás», enseña el filósofo Arístipo de Cirene. ¿Con qué empieza una cooperación fructífera? Con la comprensión mutua, por supuesto. Y la clave de la comprensión mutua es la comunicación. En el diálogo entre las personas surgen el acuerdo, la confianza y la simpatía mutua. Pero solo si la conversación se desarrolla con respeto, con calma y sin emociones innecesarias. Un método sencillo, pero eficaz Napoleon Hill, autor del bestseller «Piensa y hazte rico», aconseja: «Antes de decir algo, piénselo dos veces, porque sus palabras y su influencia sembrarán la semilla del éxito o del fracaso en la mente de sus oyentes». Hay una regla muy sencilla, siguiendo la cual, usted aumentará su credibilidad ante los demás, inspirará respeto y conseguirá más rápidamente la simpatía de la gente: haga una pausa de un segundo antes de responder. A menudo nos precipitamos con las palabras, nos apresuramos a convencer al interlocutor, no prestamos atención a la calidad de nue